¿Alguna vez te han concedido algún privilegio por el simple hecho de ser mujer? Probablemente te habrá encantado e incluso lo habrás aprovechado al máximo, pero piensa que podría ser un arma de doble filo, y lo que no te gustaría para ti, no lo quieras para tu hija, ni para tu hijo.

Hace unos días acudí a la boda de la hija de un amigo de mi marido. No conocía a casi nadie en la celebración pero como iba con mis peques, hubiera sido prácticamente lo mismo que conocer a todo el mundo porque ahí llega el momento cuando mis dos ojos de madre se vuelven supersónicos y no ven más allá de su propio ADN.

La maternidad y paternidad te otorgan superpoderes para distinguir a tus hijos en la multitud

Un día soleado en Galicia y en verano es perfecto para una ceremonia al aire libre; no demasiado calor y una brisita marina que mueve las ondas de tu cabello. Tú ponte lo que quieras pero haga el calor que haga, eso sí, “no olvides la chaquetiña, que de tarde refresca”.

Los pinchos fueron muy agradables, había además dos cuidadoras y solo seis niños, con lo cual tuve tiempo de tomarme uno, dos, tres??? daikiris y alguna que otra gamba. Pero como a mi enana le encanta comer pues… los canapés, la empanada y las croquetas le resultaron más atractivas (a mi pesar) que las riquiñas animadoras. Y el aceite, de alta calidad no lo dudo, empleado en las diversas frituras de los entremeses decidieron acabar posándose como gomina en mi pelo y brillantina en mi vestido, gracias a la mágica intervención de los dedos de mi pequeña. Y ahora no sé que hacer… porque la tintorería me va a costar más que mi supervestido rojo de rebajas…

maternidad, boda, paternidad, estereotipos del pasado, género, infanciaUna boda también es una buena oportunidad para cuestionar la educación de tus peques

Entonces trajeron el primer plato y me llama la atención que soy la primera en ser servida, supongo que porque tienen siempre un mismo punto de partida, pero a continuación me fijo como le sirven al resto de las mujeres para seguir después con los hombres. Algo que en otro momento me hubiese parecido normal, cortés y bonito… ahora me extraña. Y como no sé estarme “mona y calladita” como algún que otro compañero de mesa hubiese señalado pero solo pensó, lo comento entre los demás comensales.

No inviertas en estereotipos del pasado

—¿No os parece gracioso que sigamos con una tradición como esta de servir primero a los mujeres? ¿No está ya un poco fuera de lugar en el siglo XXI?

boda, maternidad, estereotipos del pasado, géneroNo quieras ser la primera en todo, sobre todo si el puesto se te concede gratuitamente

Y uno de los comensales procede a recriminarme;

—Pues claro que no. Es por educación, cortesía y porque las mujeres son más débiles.

giphy-estereotiposEsta fue mi reacción (interior por supuesto) a dicho comentario

—Disculpe, ¿podría definirme más débiles?

—Físicamente, quiero decir— procede a  responder de manera rápida.

A lo que yo asiento, porque en fuerza física sí suelen ir por delante en ellos (aunque no en todos los casos por supuesto), pero el debate continúa.

—Ya veo, y porque usted es más fuerte que yo…¿me tienen que servir a mi antes?¿para ir cogiendo fuerzas quizás, y tratar de equipararme con sus músculos?

—Jiji ¡qué simpática! No me dirás ahora que no te gustan “los caballeros”.

Si por “caballero” entiende usted un hombre educado, claro que me encantan, al igual que las mujeres, los niños y los adolescentes educados.

Y no sé si fue gracias a mi movimiento cortante de superceja levantada (este es un movimiento de serie)  al responder, o a que se enfriaba el bovagante, pero la conversación pasó a centrarse en la calidad el marisco, tema muy típico en Galicia por cierto, “ou falas do tempo ou das nécoras”.

Este es básicamente el problema que yo sufro en la actualidad, y es que me cuestiono cosas que antes ni me habría planteado. Para algunas personas esto significará que soy una frikie, pero yo tengo muy claro que lo que realmente quiere decir es que estoy viva, que me importa lo que pasa a mi alrededor, y que si mi entorno no me gusta, no dejo que me resbale, sino que intento cambiarlo, en especial si este afecta a la vida y el futuro de mis hijos.

 estereotipos del pasado, "mojarse" ¡Mójate contra los estereotipos de género!

Hace un par de semanas una mamá preguntaba en twitter sobre qué opinábamos acerca de que un hombre nos dejase pasar antes en una puerta. Y mi contestación aunque a algunas personas les sorprenda, por mi condición autodeclarada de feminista, fue que a mi me parecía bien. De la misma manera yo he invitado a pasar delante de mi a muchos hombres y a ninguno le ha parecido raro, o eso creo.

Y es que aunque algunos me sigan diciendo que veo gigantes donde solo hay molinos (y no miro para nadie Papalobo) no creo que esto sea cierto. Dejar pasar a alguien delante sí puede ser un acto de educación, sobre todo si la otra persona es mayor, necesita ayuda, o va cargada. No es una cuestión de sexo, sino de cortesía. Sin embargo que a mi me sirvan antes que a mi marido pues sí me parece una absoluta estupidez, qué queréis que os diga, lo mire por donde lo mire no le encuentro el sentido.

¡Mójate contra los estereotipos de género! Tuitéala

Estas actitudes de privilegio ridículas  me recuerdan a una compañera, maestra de infantil, que cuando hacía el reparto de fichas, pinturas o cualquier otro material, siempre le daba primero a las niñas y luego a ellos. Y la cantinela que acompañaba con sus actos era la de “las damas primero”, algo que tanto niños como niñas repetían día tras día, llegándose a recriminar incluso unos a otros cuando alguno se saltaba la «norma».

infancia, educación, estereotipos, género, currículo oculto, estereotipos del pasadoCuidado con el currículo oculto, puede ser muy dañino en nuestra infancia

Pero ¿cuál es la lección de fondo?¿que ellas se merecen mejor tratamiento?¿por qué otorgarles esa ventaja a las niñas?¿y qué creerán los niños sobre este tipo de acciones?¿que son segundones?¿que ellas son más débiles? Mucho cuidado con el currículum oculto querido profesorado, porque podemos hacer mucho mal sin darnos cuenta…

“Ladies First” (“Las damas primero”) es una hermosa canción perteneciente al álbum Free to be You and Me de Marlo Thomas editado en el año 1972, el cual os aconsejo escuchar y analizar cuanto tengáis un ratito. La letra de esta canción en concreto narra la historia de una niña que siempre utilizaba el lema de “las damas primero” para ponerse la primera en todo tipo de actividades, filas o juegos. Al final de la canción la niña es «cazada» junto con sus amigos por unos tigres hambrientos, y en el momento en que ellos están decidiendo a quien comerse primero, la pequeña dice “ladies first, ladies first” con lo que ya os imagináis como acaba dicha historia.

Aquí os dejo el vídeo de la misma para que entendáis la analogía entre la historia y la vida real.


Yo no quiero que mi hija ocupe en la vida ningún puesto que no le corresponda. No quiero que la dejen pasar de primera en la oficina, y luego tenga un menor sueldo que sus compañeros. No quiero que la dejen tomar a ella primero el café y luego se lleven otros el ascenso que ella se merece. No quiero que le paguen la cuenta como tradición, y luego ella tenga que hacer todas las tareas del hogar. No quiero un mundo de “damas primero”para mi pequeña, lo tengo muuuy claro.

Pero tampoco quiero que mi hijo conceda ningún tipo de privilegio a una mujer por el simple hecho de ser mujer. Quiero que si deja pasar delante a una chica, le abre la puerta del coche a una mujer, o paga la cuenta de su pareja, sea correspondido por ellas de manera natural en alguna otra ocasión. Y que cualquier acción de este tipo que mi hijo lleve a cabo el día de mañana, pueda ser también aplicada por él hacia cualquier otra persona de la sociedad, en cualquier momento, y sin ningún tipo de vergüenza o prejuicios.

Así que olvídate de las damas primero, y céntrate en ser una persona educada, amable y tolerante con tu entorno, y …

 que ni el sexo, la raza, la edad, o el aspecto de una persona limiten tu cortesía

4 Comentarios

  • Publicado hace 2 Marzo, 2017

    mercedes

    Estoy de acuerdo. La igualdad se construye desde la infancia, día a día.

    • Publicado hace 2 Marzo, 2017

      Alba Alonso

      Muchas gracias por tu comentario Mercedes. Efectivamente es día a día, gota a gota. De nada nos vale un 8 de marzo si el 7 y el 9 no funcionan igual ¿verdad? Un abrazo y esperamos tenerte por aquí a menudo!

  • Publicado hace 24 Junio, 2018

    Javier

    La verdad, como adolescente varón, me dan miedo este tipo de artículos, ya que muchas veces cuando una compañera cualquiera y yo hablamos a la vez, la dejo hablar a ella primero, de la misma manera las dejo pasar primero, a alguna le sujeto la puerta (con compañeros también lo hago, pero no creo que vaya aquí), y muchas veces me pregunto si estaré siendo machista. Yo no lo hago con intenciones machistas, lo hago más por ser cortés, pero no se si esa será la excusa que pongan también los machistas para actuar como lo hacen. ¿Qué opinais vosotras, debería seguir o no?
    Gracias de antemano.

    • Publicado hace 24 Junio, 2018

      Alba Alonso Feijoo

      Hola Javier!

      Qué maravilla que te pases por aquí. Muchísimas gracias!!
      En cuanto a tu pregunta, ese tipo de acciones como dejar pasar o abrir la puerta o ayudar con unas bolsas no pueden ser consideradas de mala educación. En realidad solo pasan a ser machistas cuando únicamente las haces hacia mujeres. En mi caso también dejo pasar delante a hombres y mujeres por igual, en especial si van cargados o llevan niños.
      Con lo cual, lo estás haciendo muy bien Javier. Y si alguna vez te encuentras con alguien que lo califique de machista lo único que tienes que responderle es que lo haces por educación y que lo harías igualmente si se tratase de un hombre.
      Ahora también te puedo decir que de nada me vale que me abra la puerta mi jefe y me deje pasar si luego cobro menos que el resto por ser mujer o nunca consigo un merecido ascenso.
      Pero está claro que ese no es tu caso.
      Un abrazo y no dudes en volver a pasarte con más dudas, ;).

Comenta

Publicaciones relacionadas