Diferencias entre arquetipos y estereotipos
Son muchas las veces que sin darnos cuenta utilizamos estas palabras como si fueran sinónimas cuando en realidad no lo son. Desde Realkiddys la lucha contra los estereotipos es un tema que trabajamos constantemente, ya que es uno de nuestros principales focos, y por eso hemos decidido dedicarle una entrada a las diferencias entre los conceptos de arquetipos y estereotipos.
¿Qué son los arquetipos?
Los arquetipos son figuras o modelos originales, unos patrones que sirven como ejemplos primarios. Muchos de ellos proceden de la mitología griega y funcionan como modelos de personajes que explican una determinada manera de ser. Un buen arquetipo no es nada fácil de crear. Su esencia reside en la habilidad de proyectar en él un carácter absoluto y único.
Los arquetipos son usados en gran parte de la literatura tradicional para simbolizar emociones, sensaciones o imágenes como el bien, el mal, la maternidad, la tiranía, la heroicidad, la maldad, etc. A partir de ese arquetipo, de ese primer molde se van construyendo nuevos modelos. El filósofo Gustav Jang nos mostró su visión del arquetipo como un modelo universal, compartido por todas las personas sea cual fuera su lugar de residencia o época.
¿Son malos los arquetipos mostrados en la literatura infantil para nuestros hijos?
En absoluto. Uno de los grandes investigadores sobre el éxito de los cuentos de hadas entre los niños fue Bruno Bettleheim con su obra «Psicoanálisis de los cuentos de hadas». Es cierto que en estos cuentos se habla de muerte, de dolor, de tragedias, de violencia y de desgracias. Pero en la vida de los niños estas temáticas también existen bien sean de manera directa o indirecta (solo hay que poner un telediario para escuchar sobre atentados, violencia de género, etc.).
Nuestra infancia puede hacer uso de los arquetipos representados en la ficción para enfrentarse a la cruda realidad. Que leamos Cenicienta no quiere decir que nos vayamos a convertir en mujeres sumisas esperando por un príncipe que nos salve. Que nuestra madre sea siempre la que haga todo en casa mientras nuestro padre ve la tele sí puede convertirnos en futuras mujeres sumisas. El mundo simbólico no es malo para nuestras niñas y niños sino que por el contrario les ayuda a entender el mundo que les rodea, a la vez que les ayuda a crecer interiormente.
Bruno Bettleheim nos decía que: «un niño necesita más que nadie que le den sugerencias, en forma simbólica, de cómo debe tratar con dichas historias y avanzar sin peligro hacia la madurez». Según el autor en las historias seguras donde no aparece ni la muerte, ni el envejecimiento, ni la vida terna. Pero en los cuentos de hadas los arquetipos ayudan al niño a enfrentarse a conflictos humanos básicos.
¿Qué son los estereotipos?
Los estereotipos son imágenes que hemos aceptado falsamente como correspondientes a un grupo por compartir determinados aspectos. Cierto es que lamentablemente en determinada literatura infantil todavía en el 2017 existen los absurdos estereotipos que ningún bien hacen a nuestros hijos, pero no debemos confundirlos con los arquetipos de la literatura tradicional.
En el caso de los estereotipos de género hablamos de la idea de cómo tiene que ser una persona únicamente basándose en el sexo biológico bajo el cual ha nacido. Esto hace que nuestros talentos personales se vean muchas veces limitados por condicionantes exteriores que nos indican cómo tenemos que hablar, vestirnos, actuar o pensar. En resumidas cuentas, cómo tenemos que vivir. En la mayoría de los casos las mujeres son las más perjudicadas por los estereotipos, pero es cierto que tanto hombres como niños también los sufren.
De hecho en la actualidad son muchos los hombres que están luchando contra dichos estereotipos de género en relación con la crianza porque quieren disfrutar de una paternidad justa, sana e igualitaria. Ellos se han dado cuenta que lejos de «disfrutar» más de la vida que las madres, en realidad se están perdiendo la de sus hijos y no quieren que eso les pase.
Para finalizar os dejo el vídeo de nuestro canal de Youtube en el cual os contaré si tenemos que deshacernos de la literatura popular que tenemos en nuestros hogares o no.
Esperamos que esto os haya ayudado a tener algo más clara la diferencia entre los arquetipos y los estereotipos. Y recordad que no hace falta que dejéis de leer literatura tradicional a vuestros hijos. Importante sí es evitar literatura contemporánea donde los estereotipos de género persisten, a menos que seáis capaces de garantizar un interesante debate al respecto.