Estereotipos en las tareas del hogar

Muchas de las parejas con las cuales hablo de igualdad, no es que sea psicóloga de parejas sino que el tema es recurrente, me dicen que funcionan de manera muy igualitaria. Ella cocina y él saca la basura. Ella friega y él corta el césped. Ella plancha y él lava el coche. Se reparten bien las tareas, ningún problema ¿verdad?

En principio puede parecer que no. Si cada pareja lleva a cabo de manera igualitaria  las tareas que considere más adecuadas para sus capacidades, da igual que ella bañe a los niños y él limpie las terrazas. Sin embargo, seguimos dividiendo las tareas por sexos y no por capacidades o aptitudes.

estereotipos en el hogar

A muchas mujeres no nos gusta cocinar, pero parece que esa ha de ser nuestra tarea por haber nacido mujeres. Y solo por eso, además, tendría que dársenos mucho mejor que a ellos. En esta sociedad, todavía parece que si no cocinas bien fallas como «mujer de tu casa».

Te aseguro que no vine al mundo sabiendo poner una lavadora. Tampoco tengo ningún máster en planchado ni friego porque es bueno para mi condición «femenina». Llegó el momento en que tuve que hacerlo y simplemente lo hice. Al principio bastante mal (por cierto) pero con el tiempo fui dominando alguna que otra de estas actividades (la plancha se me sigue atravesando, qué le vamos a hacer).

Ellos tampoco vienen al mundo con nociones innatas para arreglar ese enchufe ni esa bombilla. No tienen una capacidad sobrenatural que les ayuda a entender el dvd mejor que la lavadora y tampoco son mejores conduciendo por haber nacido hombres. Pero inconscientemente, todas y todos pensamos que sí. Esto son los estereotipos de género, ideas que prevalecen en el tiempo y que nos cuentan que determinados gustos, aficiones o tareas corresponden a las mujeres y otras a los hombres.

Desventajas de los estereotipos en el hogar

estereotipos en el hogar y corresponsabilidad

Que tú, mujer, lleves a cabo únicamente «tareas femeninas» y él «masculinas» puede repercutir de manera negativa en varios aspectos:

  1. Si la pareja tiene hijos o hijas, estaremos perpetuando los estereotipos con nuestra propia actuación. Con ello negaremos sus propias capacidades y aptitudes para cualquier tipo de tarea. Tal vez tu hijo sea un magnífico futuro chef pero si lo que le toca es siempre bajar la basura en vez de hacer la cena difícilmente lo averiguaremos. Educar en la corresponsabilidad es fundamental.
  2. Tanto para ti como para tu pareja, en el caso de ser de diferente sexo, dividir las tareas en «masculinas» para hombres y «femeninas» para mujeres sin atender a vuestros gustos o aptitudes es todo un derroche de tiempo y energía. Si a él se le da mejor cocinar ¿por qué no invertir estos absurdos roles de una vez? O realmente nunca lo lleguéis a averiguar ya que jamás os habréis dado la oportunidad.
  3. Cuando tus hijos se independicen o bien tengan que vivir fuera un tiempo para poder realizar un trabajo o carrera universitaria el dominar tareas «femeninas» y «masculinas» en el hogar será toda una ventaja. Y ya ni hablar de lo que les ayudará en las relaciones personales tanto si viven con sus parejas como si lo hacen con amistades.

Como habrás podido observar esa manera que tú consideras igualitaria quizás no lo sea tanto…

¿Cómo romper con los estereotipos en las tareas del hogar?

Quizás no lo veas tan sencillo. No te vuelvas «crazy». Poco a poco. Y por favor, si pides un esfuerzo a tu pareja, que también vea lo mismo de tu parte. Hacer la paella de los domingos no está tan mal si no eres la persona que cocina el resto de la semana. Y sacar el perro a hacer pis puede darte una pereza tremenda al principio, pero volver y tener el desayuno puesto también está genial.

corresponsabilidad infantil

Id poco a poco. No tiene que cambiar todo de la noche a la mañana. En realidad, ni siquiera tiene que cambiar. Pero el probar e intentar diferentes tareas te demostrará que seas hombre o mujer no eres nulo para determinadas tareas por haber nacido con un determinado sexo. Te aseguro que te sorprenderás con el resultado. Esto sí es salir de tu zona de confort y lo que aprenderás te ayudará de por vida.

Y si todavía no crees siquiera estar en la zona «igualitaria» tendrás que trabajar la conciliación en primer lugar.

Desde Realkiddys te damos todo nuestro apoyo. Sigue nuestros consejos para que sea más fácil!

 

Comenta

Publicaciones relacionadas