Lo vemos en todas las vueltas ciclistas, él gana, y las dos azafatas suben al podium únicamente para agasajar al ganador con sendos besos.  Dicho gesto es en realidad pura simbología de una sociedad en la que las mujeres aparecen representadas muy frecuentemente bien como un reclamo, o como un premio.

Que ciertas actitudes sexistas sean una «tradición», no quiere decir que sean correctas (Tuitéala)

 Seguramente llegado este momento, estaréis pensando, que esto es una tontería más, que no hay que sacarle punta a todo, etc, etc, etc.

Pero cuando le preguntes a tu hija qué quiere ser de mayor y te conteste:

—Guapa y sexy.

—¿Cómo?Por qué?

—Las guapas son las que tienen más éxito papá, son las más valoradas por todo el mundo.

No dejes que el sexismo se apodere de los sueños de la infancia.Foto Vogue.

Y cuando le preguntes sobre sus aspiraciones profesionales te conteste:

—Casarme con un hombre rico o famoso.

Ese será el momento en que comiences a pensar que,,,

esos detalles que te parecían inofensivos,

esos mensajes que tampoco eran para tanto

esas imágenes que eran una simple tradición

tenían más significado del que tú les dabas…

Y esto también puede pasar con los chicos jóvenes, cuyas aspiraciones respecto a las mujeres puedan llegar a ser: casarse con alguna mujer bella que los cuide y atienda.

Piensa que ahora aún estás a tiempo de hacer algo, como preguntarte qué sentido tiene esa figura de la chica del beso en el siglo XXI. ¿Seguir valorando a las mujeres únicamente por sus atributos físicos?¿Representarlas como pura carnaza para atraer a más público masculino? Así debió pensar el ciclista Peter Sagan en el año 2013, cuando tocó el culo a una azafata en el podium, pidiendo disculpas por su actuación, para volver a hacerlo semanas más tarde.

El ciclista Peter Sagan optando a lo que consideró "su premio".Foto Reuters vía Elmundo.

Segunda metedura de "mano" del ciclista Peter Sagan. Foto Eurosport.

Cierto es que se este tipo de actuaciones calificadas como «desafortunadas» (yo soy demasiado señora para denominarlas correctamente) son aisladas, pero el hecho sigue siendo el mismo.

Luis Román Mendoza nos comenta en su artículo Las chicas del Beso como Gerard Nevue Wek, presidente de la World Endurance Championship, opina que este gesto es «una reminiscencia del pasado que no tiene sentido hoy. La mujer ocupa otro lugar». Pues démosle ese lugar de una vez, y no sigamos con este tipo de «tradiciones», por favor.

El sexismo no juega a una sola banda

Lo que es sexista hacia las mujeres, también lo es hacia los hombres, por eso no entendemos que la manera de subsanarlo sea haciendo lo mismo, y permitir que las mujeres tengan azafatos modelos que las besen, o que las deportistas puedan tocar el culo a ellos en el podium, aunque haya gente que así lo piense, como la ciclista australiana Lowren Rowney que decidió de nuevo «desafortunadamente» imitar a su colega.

Las actitudes sexistas hacia los hombres son igual de negativas y condenables. Foto ABC twitter.

El sexismo no se arregla cambiando hombres por mujeres. Foto  Web VeloFocus

Lo que es sexista hacia las mujeres, también lo es hacia los hombres (Tuitéala)

Vestimenta de azafatas y azafatos. Sexismo de mal gusto.

Y es que además no solo el beso de turno es cuestión de un profundo estudio antropológico, porque ¿qué me decís de las vestimentas de las azafatas? ¿Qué opináis sobre el atuendo de estas chicas en junio de este año 2015 en el Tour Diamond Flanders en Bélgica? Seguro que las ganadoras, pues además era una carrera femenina, se sintieron muuuuuuy cómodas. Y es una imagen perfecta para mandarle también mensajes a esos pequeños de la foto ¿verdad?

Cierto es que la organización procedió a disculparse después de toda la crítica que les llovió, pero esto no es un error tipográfico, ¿no había nadie para darse cuenta de semejante aberración?

Hombres azafatos

En mayo de este 2015 en el GP Fórmula 1 deMónaco, las azafatas fueron por primera vez sustituidas por algunos azafatos. Una acción fantástica para permitir la introducción de los diferentes sexos en este tipo de funciones. Algunos corredores como Vettel no consideraron que este hecho fuese apropiado en absoluto y cito sus palabras: «las tradiciones hay que respetarlas», ¿deberíamos volver a siglos pasados quizás, Señor Vettel?

La función de azafata y azafato es necesaria y debe ser respetada, pero no debe estar envuelta en toda esta capa sexista que por un lado limita su acceso (porque parece que tienes que ser modelo), y por otro supone extralimitarse en funciones que no atañen a su profesión. Quizás, como anécdota, este fue el motivo de que esta azafata se negase a dar «el beso» al ganador…

No dejes que estos pequeños detalles pasen de largo delante de ti, reflexiona sobre ellos, trata de cambiarlos o dialoga con tu entorno sobre su sentido, y en especial, piensa en la repercusión futura que pueden tener sobre la infancia del hoy.